jugando a amarnos y engañar así al corazón,
me duele el saber que actué a favor de tí,
porque yo sabía que tu herida sería inevitable,
lo vi venir pero preferí arriesgarme
a nunca haberte demostrado mi amor.
Almas gemelas que nunca podrán estar juntas,
sentimientos divididos por la cruda realidad,
pensamientos unidos, corazones partidos,
deseos reprimidos, ojos y deseos heridos,
así es la vida de ruin con nosotros
nunca tuvimos la dicha de saber si esto era verdad.
Hubiera querido retenerte,
pero ya habías iniciado tu partida;
hubiera deseado contenerme,
pero ya había comenzado a amarte;
me hubiera gustado enamorarte,
pero ya me amabas desde siempre.
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