no alcanzaría ningún lugar para imprimir
tanto amor depositado en mis dedos
y escritos en el mural de tu corazón.
Pienso que si las nubes fuesen hojas de papel
pediría al viento me permitiese volar
y escribir en cada una de ellas consignas de amor
para un rayito de sol como lo eres tú,
llevando mis mensajes directamente a tí
en el meridiano de tu vida.
Se que soy un soñador
y estando despierto es una locura ser así,
porque hay mucho que decir
con cada segundo que paso junto a tí.
Hablando sin hablar,
pienso que la palabra es muerta
y que solo el corazón la puede revivir
y alimentarse de ella cada día.
Por eso decido escribir
esperando mantener tu corazón vivo,
latiendo de mil en mil
y sintiendo con mucha pasión.
Pero cada segundo es testigo mudo
que te hablo con verdad y honestidad,
que debo llegar a ti
y quererte dia a día hasta el fin.
Las horas pasan y a veces no te veo
y se acumulan en mi los pensamientos,
los versos y las rimas
las prosas y los sonetos
para comprobar que es cierto
que cada segundo que pasa
es un verso escrito en tu nombre.
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